El día de hoy fue de aquellos interminables hasta que nada pasa.
Fue una pizca de deseos por apresurar a Chronos,
de darle un pellizco para que apresure la marcha.
Dos horas pasaron... faltaban unas cuantas más
Aquel deseo seguía latente mientras me recordaban la areté.
El camino de las almas habría de recorrer... "aquí nos quedamos"
Con algo de hambre salí, no recuerdo si por hambre o por prisa.
Dos horas más pasaron... faltaban unas cuantas más
¡Atareado! ¡mucho por hacer! El día pasaba, cada vez más gris.
Sin rumbo, desconcertado, afligido por los deberes.
Compañeros de lo gratificante paseaban en frente de mí.
dos horas más pasaron... faltaban unas cuantas más
Muchas caras crucé, el doble de ojos miré
Voces simulaban presencia absoluta del ser, pero no del estar
Algo meditabundo merodeaba, pero aún con deseos
Dos horas más pasaron... ¡hora cumplida!
Llegué con anticipación, aquella de nunca esperarse.
Un colega pasaba, algún otro también.
una, dos, tres vueltas... ¡nada! mi deseo se veía opacado.
¿Dónde estaría? No lo sé... ella nunca llegó.
"No solo de letras vive el hombre... se necesita también de locura"
Ü-mr
viernes, 12 de septiembre de 2008
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